martes, 10 de septiembre de 2013

Sobre el inicio de curso

Me publican en Alfa y Omega un breve artículo donde explico, muy sucintamente, cuales son los mecanismos por los cuales anulamos el talento de nuestros mejores alumnos.
La trituradora de talento

5 comentarios:

  1. Muy bien, José Manuel, pero, como en el título de la revista que te ha publicado el artículo, la verdad es que el inicio y el final van unidos, y el final son las juntas de evaluación. Si tienes un momento, mira lo que cuento en mi blog:
    http://papabloblog.blogspot.com.es/2013/09/praxis-educativa-6-somos-nosotros.html

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  2. Solo agradecerte que sigas escribiendo de educación y nos des la ocasión de leerte.

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  3. Gracias, Emilio. A ver si puedo prodigarme más.

    Guachimán, tienes razón en muchas cosas, pero hay otras en las que tengo mis dudas. Me gustaría responderte en detalle, pero me es imposible ahora. He estudiado con bastante atención lo que ocurre en los claustros de la pública, porque eso tiene efectos importantes en los resultados: por ejemplo, a igualdad de conocimientos es más probable que suspenda un chaval con padres sin estudios que unos cuyos padres han estudiado. Sin embargo, hay un contrapunto a esto, y es que suspendemos mucho más que en el resto de Europa. Y no tengo clara la repartición de culpas en esto. Pero cualquier día me meto con esta historia.

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  4. Será recibida con mucho interés tu aportación al análisis de este complejo e importante asunto, José Manuel. Ciertamente, conocer con la mayor aproximación qué parte de culpa de los actuales males le corresponde a cada factor sería muy útil si algún día nos ponemos en serio a intentar mejorar. El nivel cultural de los padres es muy importante (recuerdo un artículo tuyo), pero te voy a aportar otro dato para que te vuelvas más loco aún: también importa mucho el nivel de valoración de la cultura, que puede no corresponderse del todo con el nivel cultural de la familia: aún quedan padres de nivel cultural bastante bajo que valoran mucho la escuela, y viceversa.

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  5. Sí, es algo que también he estudiado. Es lo que Inger Enkvist denomina como estar o no estar "dentro de la cultura del libro". Hay mucho analfabestia con título. En España, por eso, es mejor indicador el número de libros que posee que el nivel de estudios. También se nota en la concertada: hay CCAA donde la elección del centro se produce por status, y en otros por calidad del centro, y eso tiene también consecuencias. En general, los que entienden la cultura identifican mejor las buenas escuelas, sean públicas o privadas, y saben ayudar mejor a sus hijos en las tareas escolares (ayudar en el buen sentido, no hacérselos). Y hay que pensar en que hubo en España dos generaciones que no habían tenido oportunidad de estudiar y se dejaron la piel por que sus hijos llegaran a la universidad, tenían una valoración de la cultura muy superior a la de los padres de hoy.

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