martes, 28 de diciembre de 2010

La estupidez del año

[ACTUALIZADO] Los que me conocen saben que la asignatura de Educación para la Ciudadanía ni las de nombre similar me gustan nada. En parte por argumentos bastante repetidos por muchos, en parte por otros bastante menos usados. No voy a entrar en la discusión de fondo porque este no es el tema de este blog, pero en mi opinión es una puerta abierta en la escuela a grupos ideológicamente muy minoritarios para que puedan transformar el dinero de las subvenciones (y aumentarlo) en prosélitos.
Ya he dicho alguna vez que esta Educación para la Ciudadanía no se parece en nada a la que existe en otros países europeos que conozco, y de hecho los métodos y argumentos que el Ministerio ha empleado para desacreditar al movimiento ciudadano que se ha posicionado en contra hubiera sido merecedor de un suspenso en Ciudadanía europea. Hace años publiqué esta pregunta, sacada de la evaluación de competencia ciudadana que se estila en Europa:
3. Un adulto es buen ciudadano si (poner un grado en una escala entre muy importante y nada importante): a) Trabaja mucho. b) Participaría en una protesta pacífica contra una ley que considera injusta.
Creo que es evidente que la opinión (ni el tratamiento) del Ministerio sobre los que se oponen a esta asignatura (creo que exponer argumentos o presentar recursos se puede considerar protesta pacífica) no es la de "buenos ciudadanos". Remarco, para el que no la haya leído bien, que la consideración de "injusta" no es del Gobierno ni de usted ni del que pasaba por allí, sino del ciudadano que protesta. No es una cuestión de si se está de acuerdo con él o no: si considera que una ley es injusta, el buen ciudadano es el que protesta, y el mal ciudadano es el que no lo hace. Punto.
Otra cuestión preocupante y descalificadora para la asignatura tal y como se ha diseñado en España es el análisis de los argumentos que desde la administración se han esgrimido para defenderla. Pero la estupidez máxima la he leído en esta desenfocada noticia que publica El país hoy (desenfocada porque lleva al titular una afirmación falsa, puesto que lo que se reclama es la "preferencia" y no el "monopolio", y se deja lo mollar). Lo que dice el abogado del Estado en su recurso es lo siguiente:
"La concepción filosófica que presupone la democracia es el relativismo".
Repito, por si no lo ha leído bien:
"La concepción filosófica que presupone la democracia es el relativismo".
Así, entrecomillado, aparece en el periódico (el pdf que enlaza la noticia no es tal, sino una imagen de la primera página del recurso) y, salvo que sea una inocentada, es una cita del recurso del abogado del Estado.
A lo mejor soy un poco maniático, pero sólo la indignación que siento ante tamaña barbaridad ha conseguido sacarme del trabajo (últimamente no tengo tiempo de nada) y dedicar unos minutos al blog. Porque el relativismo no es la concepción ideológica de la democracia, sino la de las dictaduras. No hace falta leer a Tucídides ni a Aristóteles para saberlo –o, más recientemente, a Orwell–, sólo el libro de texto de Historia o de Filosofía de 3º de BUP, algo que se presupone necesario para llegar a abogado del Estado, ya que no para ministro.
Son los tiranos los que piensan que la vida y la libertad (las de los demás, claro) son relativas comparadas con su programa ideológico, y son precisamente las democracias las que escriben cosas como la Declaración Universal de los Derechos Humanos, colección de absolutos donde las haya. Por eso, todos sus artículos comienzan por la palabra "todos" (o "nadie"), salvo el último que empieza por "nada".
Y habrá quien aplauda este recurso con las orejas. Será para tapar que no tiene nada entre ellas.
[ACTUALIZACIÓN] Leído el recurso completo (por hacer las cosas rápido, no me di cuenta de que se podía, tal y como me han comentado amablemente: gracias), he de añadir algunas cosas: la frase que se reproduce es de Kelsen, un conocido y reputado defensor del positivismo. Sigo diciendo lo mismo de tal frase.
Me resulta curioso del recurso que en la primera parte alerte sobre el peligro de relativizar las leyes y el propio Estado (págs. 5 y 7), llegando a decir que la capacidad del individuo de relativizar las leyes pone en peligro el Estado democrático, y luego que sostenga que el relativismo es la base de la democracia.
No estoy acostumbrado a leer recursos, pero me ha llamado la atención la acumulación de falacias
en este, probablemente habituales entre los abogadillos de medio pelo, pero que uno espera ausentes en un recurso de la abogacía del Estado. Los habituales son los de la falsa vivencia y los del argumentum ad consequentiam en la argumentación general. Me resulta también curioso que se justifique la bondad de los decretos en cuestión basándose en lo que la LOE dice pretender y no en lo que en realidad hace. También sigo viendo una contradicción lógica en justificar el relativismo con un argumento de autoridad. Y el argumento de que no cuentan con la menor me parece de trilero, aunque puedo estar equivocado.
La frase en que se basa el recurso no es la de Kelsen, sino la siguiente, que no había visto:
"La dignidad de la persona o los derechos inviolables de la persona –es evidente– no son objetos de la experiencia sensible sino creencias generalmente compartidas para las que se postula un fundamento moral" (pág. 18).
Con este presupuesto, lo que pone a continuación no sorprende demasiado: la falsa contraposición entre la moral general que defienden aquellos con creencias religiosas y los que no la tienen es también una falacia: se puede defender una moral general desde diversos puntos de vista sin recurrir a las creencias religiosas y sin recurrir a las que este hombre cita en el recurso (deontológica, cognotivista, emotivista), morales todas ellas de muy corto alcance y que no pueden fundamentar el Estado de derecho.
El fundamento de nuestro Estado de derecho es el axioma, no la simple creencia, de que el hombre es un absoluto, y si para justificar Educación para la Ciudadanía tienes que saltarte tal cuestión, pues ya lo has dicho todo.

9 comentarios:

  1. Me sumo a lo que dices y me parece muy valiente que no te hayas callado. Educación para la ciudadanía forma parte de ese conjunto de cosas que bajo la apariencia de una visión progresista del mundo, nos devuelven a concepciones de la educación impropias de un Estado democrático y de derecho. Se trata de una asignatura con tan fuerte carga ideológica que no debiera formar parte del currículo escolar.

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  2. El documento enlazado desde El País no es un pdf sino un tif (de esos multicapa o como quiera que se llame) y incluye las 32 páginas del escrito de la Abogacía del Estado. No quisiera precipitarme, pero dando por bueno el documento he de decir que la cita que tanto le ha indignado no parece un error del redactor, más aún, éste parece haber suavizado la intención del original.

    Puedo enviarle por email el documento en pdf o djvu si así lo desea.

    Muy fuerte ésta noticia.

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  3. Quise decir 23 páginas.

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  4. Gracias, anónimo, ya está arreglado. Lo abrí con el programa equivocado. Cuando, al principio de la anotación, hablaba de puerta abierta en la escuela a grupos ideológicos me refería sobre todo a estos relativistas organizados. Y, sí, el redactor lo ha suavizado.
    Emilio, se necesita valor cuando arriesgas algo, pero no es este el caso: si algo tenía que perder en este tema, ya lo perdí hace muchos años.

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  5. 1- El relativismo se aplica a tanto campos y con tantos matices que por si sola la frase no dice nada. Se puede usar casi como sinónimo de pluralidad o en contraposición al absolutismo que precedió la democracia. Precisamente que luego haga una referencia negativa a relativizar las leyes es suficiente para entender a que relativismo se refiere.

    2-"Son los tiranos los que piensan que la vida y la libertad son relativas comparadas con su programa ideológico"

    Y usted y yo pensamos que su programa ideológico cualquiera que sea es relativo a la vida y libertad. Eso no es relativismo, es establecer unos valores absolutos y hacer depender el resto de ellos.

    3- La única razón para el sobresalto es que el mayor enemigo del "relativismo" vivo es el Papa. Y de este modo puede encontrar una indignación similar a la suya en diversos sitios católicos-conservadores. Evidentemente no hablan de lo mismo que la abogacía pero conviene no olvidar que el Papa hablando de relativismo critica fundamentalmente la Revolución Francesa y la democracia liberal. Si hablamos de ese relativismo papal la educación en democracia debe ser relativista sobre todo si se desea preservar la libertad.

    4- Me apunto lo de no llevar a los hijos a clase como forma de protesta pacífica, y que decir de la represión del ministerio, que aprovechen en los tribunales y denuncien las torturas ahora que han ganado el juicio los dos etarras.

    5- Sobre educación para la ciudadanía no se si se parecerá más o menos pero apuesto a que la diferencia es menor entre las asignaturas que entre los ciudadanos.

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  6. En mi opinión lo que ha sucedido con este asunto es que el Gobierno no se atrevió, no supo o no pudo quitar la religión de los centros escolares y en vista de eso decidió, que ya que no se podía evitar una asignatura confesional al menos hubiese dos, la de la Iglesia y la del socialismo feminista, de tal modo que lo que en una escuchan contra el aborto en la otra lo oyen a favor, por un lado está el catecismo católico y por el otro el catecismo feminista.
    El resultado final no puede ser más penoso. Muy poco de Constitución española, muy poco de Unión europea, los valores con claro sesgo de género, y sobre todo muy poca ciudadanía en el sentido de ese ser humano que quería dibujar la Ilustración como ciudadano conocedor de sus derechos y deberes y del marco político y social que lo rodea.
    De ahí que siempre interpreten que todos los opositores a la misma necesariamente deban provenir del terreno de la religión y cuando contesten a cualquiera que disienta lo hagan en esa clave, y en esas estamos.

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  7. Mario:
    1. Una frase no dice nada, por eso tienes el documento para ponerla en contexto. Si la frase es la base de la argumentación, a lo mejor sí dice algo. El término "relativo" se aplica a muchas cosas, pero "relativismo" tiene un significado concreto, como lo tiene comunismo, cristianismo, socialismo, liberalismo, etc.
    2. No digo "relativo a", sino "relativo comparado con". No es lo mismo.
    3. Conozco bastantes más "enemigos" del relativismo que el papa. Sólo salen menos en el periódico. Las facultades de filosofía están llenas de ellos (y también de relativistas, claro). Sobre lo que dice el papa y a qué se refiere, creo que tienes cierta confusión. Creo que he dicho bien claro que para criticar el relativismo Dios y los discursos que lo tengan en cuenta no hacen falta. En este caso utilizas el mismo método falaz que el abogado, puesto que la contraposición papa/relativismo es muy incompleta, fruto de una falta de lecturas o de un interés inconfesado, y por tanto dice mucho de quién la utiliza, pero sigue siendo una falacia más.
    4. Eres muy libre de hacer lo que quieras... hasta que la Guardia Civil vaya a interesarse por el caso.
    5. Antes apostar algo, me enteraría de las diferencias. A Mr. Blunkett, ex-minitro laborista de Educación en el Reino Unido, le pareció una burrada. No dijo qué le parecíamos los españoles, pero no vi que insultara a nadie en las veces que he tenido el placer de hablar con él.

    Emilio:

    Antes que nada, imagino que habrás visto esto, pero por si acaso, ahí va:
    http://www.vanitatis.com/video/teen-mom-agresion-mtv-amber-portwood-20101230.html

    Ya he dicho antes que me parece que el carácter de la asignatura va más allá: es una puerta abierta en la escuela a ideologías muy minoritarias para que puedan transformar el dinero de las subvenciones en prosélitos. Creo que es algo más amplio que el socialismo feminista.
    El resultado final es, intelectualmente muy escaso, pero tampoco desentona tanto con el actal programa de algunas asignaturas más clásicas, después de tanto recorte y tanta tontería.
    Cada vez que hablo de este tema soy metodológicamente ateo, pero les da lo mismo: siempre me salen con el papa. Y eso que ni me conocen ni saben nada de mí, ni nada de lo que digo, salvo sus prejuicios, pueden inducirles a sacar el tema. En muchos son sólo prejuicios y comodidad. En otros un método de descalificación del contrario sin tomarse la molestia de escucharle. En cualquier caso, un insulto implícito que algunos ni sospechan (pero cuando les contestas en el mismo tono se ofenden rápido, oye) y con que otros muestran su desprecio de manera evidente. Habitualmente vuelvo a repetir argumentos y centrar la conversación, pero si no hay manera, se les ignora y punto.

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  8. Un análisis muy certero, poniendo de manifiesto las inevitables inconsistencias del planteamiento relativista, para el que todo es relativo a excepción de sí mismo, que es absoluto.

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  9. Tengo la impresión de que los tiempos que corren no sólo son malos para lírica también para alguna cosa más como la filosofía. Acabo de leer de Gianni Vattimo, Adiós a la verdad, donde más o menos se sostienen cosas del tenor de las del escrito de la Abogacía del Estado. Adiós a la verdad que se considera la base misma de la democracia, claro está, de una democracia de la que en otro momento se dice:"Tomemos por ejemplo la noción de diálogo, o incluso la de democracia, que en los años sesenta y setenta todavía eran nociones utilizadas y respetadas. Hoy son avatares ideológicos de los cuales debe sospecharse a primera vista, y no sólo a nivel académico o de alta cultura."
    Más que de pensamiento débil lo propio sería hablar de anemia intelectual.

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